Libreta Tercera  Pág. 54 - Obra No. 160
Diálogo y Reflexión en 5 espinelas en las que
hace resaltar la infinita ventaja de seguir el camino
estrecho que va a Dios, en vez del ancho del placer.


Dos Caminos


-"Busqué vida regalada;
y tanto en ello luché
sin triunfo, que malgasté
toda mi vida pasada.
Hoy, fatigosa jornada
veo en la vida vivida.
Sí; que perdí la partida:
En mi afán por conquistar
oro y fama, fue el bregar
vana misión en mi vida.

Y veo triste de mí,
que la vida que me resta
no ha de ser una floresta
como soñé y pretendí.
Heme enfermo y viejo aquí:
Junto con la juventud
se me escapó la salud.
Fabricó mi fantasía
castillos que arrasaría
de los años el alud."

Así, llorando al hablar,
se quejaba un comerciante;
y un alma, de Dios amante,
le dijo: -"Todos al par
en conquistar y triunfar
ciframos nuestro destino.
Todos en el mismo sino
ponemos el corazón.
Sólo estriba la cuestión
en acertar el camino.

Y, ¿qué camino mejor
que este que a mi me seduce
y que al Señor me conduce
y es descanso en el Señor?
Veo en él en cada flor
y en cada nueva alborada
y en cada nota escapada
del son de la creación,
motivo de distracción
y descanso en la jornada.

Fue descansar tu intención
en una cama de plata;
yo he descansado en la ingrata
de la mortificación.
Tu nutriste el corazón
con vino de vanidad;
yo con agraz de humildad;
hoy por eso has cosechado
flores que se han marchitado;
yo...¡frutos de eternidad!”

José A. del Valle
Madrid, 15 de Mayo de 1962
Día de San Isidro.