Ép. y Míst. Pág. 48
Obra No. 10 – Poesía Didáctica

¡ ASÍ !

(Con mi hijo José
frente al Malecón )

¿No ves ese “velero”, (1) hijo querido,
cruzar el mar en calma,
y ansioso de llegar al dulce puerto
tender aún más al viento
el ala dócil de su vela blanca?

Navega, majestático y sereno.
Sólo un ruído ligero
nos denota que avanza;
es que del mar, la espuma bullidora
una canción entona
al suave ritmo de su lenta marcha.

Como el “velero” ese que ves, quisiera
que por el mar de tu vivir pasaras,
hijo del corazón: serenamente...
y esto sólo se logra con un alma
como la vela del “velero”, dócil;
como la vela del “velero”, ¡blanca!

José A. del Valle
(1) He sustantivado este adjetivo
     por emplearlo así también
     marinos y pescadores cubanos.