Libreta 6a.  Pág. 78 - Obra No. 494
En Décimas le canta a Puerto Rico
sus encantos, su riqueza y su bienestar

No Les Creas


Nuestra islita borinqueña
es bella como ninguna
pero de escasa fortuna.
Como el tío Sam se empeña
en darle vida halagüeña,
nadamos en la opulencia
y vemos con evidencia
que nos pusimos las botas.
Y...¿todavía hay idiotas
que quieren la independencia?

Nuestra islita es muy bonita,
mas, no olvides una cosa:
que es, a más de montañosa,
superpoblada y chiquita.
De modo que nuestra islita,
aun gobernada a conciencia,
al borde de la indigencia
por siempre nos va a tener.
¡Ay, bendito! Y...¿puede haber
quien quiera la independencia?

Boricua: la realidad.
Compatriota: la verdad
es que quieren convencerte
con la intención de imponerte
su rígida voluntad.
¿Quieres mayor libertad
que estar libre la paciencia
de la brutal ingerencia
de los comunistas rusos?
Y...¿Todavía hay ilusos
que quieran la independencia?

Nuestro pueblo sufriría
la más grave situación
y más hambre que un ratón
en una ferretería,
si lograsen algún día
ciertos hombres sin conciencia
someter nuestra existencia
a los rusos o a los chinos.
Y...¿todavía hay cretinos
que quieran la indepoendencia?

No les creas, juventud,
que son todos comunistas
y por lo tanto, sofistas
sin conciencia y sin virtud.
¿Dónde está la esclavitud
que aprisione tu existencia
y avasalle tu conciencia,
cuando tienes libertad
para aplastar su maldad
vestida de independencia?

Son almas frías y ateas
que muestran su comunismo
con disfraz de patriotismo.
No les creas. No les creas
aunque en la iglesia las veas.
Puerto Rico: la experiencia
de Cuba dió a tu conciencia
luz y fuerza para darles
un tapaboca y gritarles:
¡Al diablo la independencia!

José A. del Valle
3/19/76