Libreta 3a.  Pág.135 - Obra No. 230
En 4 Espinelas despide a lo español,
con el corazón, y le augura al que
marcha, lo mejor en la nueva tierra.

Despedida

Con motivo de irse para E.E.U.U.
José Esparraguera Hevia,
Escrita a petición de José Albarracín.

Hevia: ¡mi amigo! te vas;
y hoy, al querer despedirte,
tánto quisieran decirte
estos que dejas detrás;
tánto en ellos dejarás
de recuerdo y simpatía
que, mal la prosa podría
declarar nuestra emoción:
por eso es que el corazón
recurre a la poesía.

Aquí, pues, hemos venido
no sólo la mano a darte
y buen viaje desearte
con ánimo enternecido;
también, amigo, te pido
en nombre de estos que atrás
con tu ausencia dejarás,
que en Cuba, o en tierra extraña,
a tus amigos de España
no los olvides jamás.

Que ellos, Hevia, si te están
con afecto despidiendo,
también te están prometiendo
que jamás te olvidarán.
Cuando la mano te dan
desbordante de emoción,
no olvides, Hevia, que son
españoles y, por tanto,
aunque despidan sin llanto,
regalan el corazón.

Este lo hemos levantado
pidiendo a Dios para ti
que puedas volver aquí
en turista transformado.
Y Dios, que siempre ha escuchado
nuestra sentida oración,
ha de darnos la ocasión,
como ahora al despedirte,
de ofrecerte, al recibirte,
otra vez el corazón.

José A. del Valle
Madrid, 18 de Julio de 1962.