Home > Sus Poesías > A Cuba > Patriótica Visión
Libreta 4a.  Pág. 107 - Obra No. 324
En Décimas sublimes canta a Cuba con la lira
guajira del Cucalambé y con la Esperanza que le da la Fe.


Patriótica Visión


Poesía que obtuvo el primer premio (medalla de oro)
en el certamen literario celebrado en 1969 por el
Círculo Cubano de P. Rico (Casa Cuba) para
conmemorar la fecha patriótica del 20 de Mayo.

-1-
Préstame, Cucalambé,
por un momento, tu lira.
¡La más cubana y guajira!
Tú, Jesucristo, la fe
que a mi espíritu le dé
la visión arrobadora,
dulce y esperanzadora,
de que a mi Cuba querida,
hoy en tinieblas sumida,
vuelve a besarla la aurora.

-2-
Cuba: tristeza sombría
que silenció tus cantares
se cierne sobre tus lares.
Sí, que la sana alegría
que te tornó en poesía,
que te dio gracia y salero,
que subyugó al mundo entero,
que tanta gloria te dio,
un hijo te la mató
vendiéndote al extranjero.

-3-
De mi memoria en las alas,
cuando mi labio te nombra,
a pesar de tanta sombra,
voy contemplando tus galas.
Galas con las que te igualas
al bello bíblico edén,
y que, cual de este, también
desterraron la alegría;
mas, cual él, también un día
tendrás tu propio Belén.

-4-
¡Tus galas! Las llevo en mí
porque están en mi memoria
las páginas de tu historia,
las proezas del mambí,
tu sol, quemante rubí,
del guajiro los cantares,
la música de tus mares,
la gracia de tus mujeres,
tus bellos atardeceres
y el rumor de tus palmares.

-5-
Aún en mi retina están
de tu valle de Viñales
los mogotes colosales
que tanta fama le dan.
Tu Habana, donde el afán
lo aplacaba la alegría;
donde el más serio reía
y en cada boca era rosa
la sonrisa bondadosa
con que el cubano vivía.

-6-
El valle de Yumurí,
Bellamar y Varadero;
glorias para el matancero
como el son lo es para tí.
Veo también ante mí
de Las Villas los centrales;
sus vastos cañaverales
y su rica raspadura,
émula, por su dulzura,
de los melífluos panales.

-7-
Los orondos tinajones,
do el agua, con abundancia
la camagüeyana estancia
guardaba para abluciones...
Recuerdo entre otras canciones,
una que me maravilla:
la que del Cauto a la orilla
y siguiéndolo en su giro,
iba cantando un guajiro
sobre su yegua rosilla.

-8-
Escúchala, Cuba mía,
con reverente atención;
que es, a más de una canción,
vaticinio y profecía.
Pronostica tu agonía
y ésa tu congoja cruel;
mas, porque a Cristo eres fiel,
hará la Virgen del Cobre
que el hijo tuyo recobre
paz y libertad en El.

-9-
“Ayer al Cobre me fui;
y de rodillas estaba
y a la Virgen suplicaba,
cuando, como en sueños, vi
que el esfuerzo del mambí,
su sacrificio y euforia,
que son páginas de gloria
que en la manigua escribió,
un monstruo las arrancó
del libro de nuestra Historia.

-10-
Pero la Virgen me dijo
al verme a un tiempo llorar,
enmudecer y temblar:
”Cálmate; no temas, hijo.
Yo también, cual tú, me aflijo,
pero...¡Ya todo ha cambiado!
¡Mira el libro restaurado!
Una guerra santa, gloria
le dio de Cuba a la Historia,
mayor que la del pasado

-11-
Fue la batalla librada
por el mambí, ley de vida:
la del que a la madre olvida
por la libertad soñada.
Esta es por la fe sagrada.
¡Albricias! Vemos los dos
que, por ir de Cristo en pos,
desde Pinar hasta Oriente,
cada hogar es una fuente
de amor a Cuba y a Dios”.

José A. del Valle

San Juan de Puerto Rico , 4 de Mayo de 1969