Versos a mi Felita Pág. 2 Obra No. 618
Elegía llena de ternura, a su Felita.

A  Mi  Felita  en  su  Deceso

En la frente, Felita querida,
te di el primer beso.
Y por casta, por pura, por eso:
por ornar la pureza tu vida,
otro beso he dejado en tu frente:
el postrero y doliente
que llorando te di en despedida.


Al bajar al sepulcro, en la caja
que tu cuerpo querido amortaja,
una rosa de nítida albura
como tú, mi Felita, de pura,
llorando dejé,
no sin antes besarla y decirte
que aunque triste, ¡muy triste! la beso
por querer otra vez despedirte,
no ha podido enpañar mi tristeza
la alegría y pureza
con que siempre tu frente besé.

Hoy que tengo, Felita, el consuelo
de que vives la gloria del cielo
y que sé que me escuchas, te pido
que esa santa pureza que ha sido
tu lábaro y celo,
y que amante infundiste en mi alma,
no la pierda, le pidas a Dios,
porque quiero, después de la muerte,
ser muy digno también de tu suerte,
bendecirle por siempre y cantarle
y extasiados los dos adorarle...
pero juntos. ¡Muy juntos los dos!

José A. del Valle