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Versos a mi Felita Pág. 1 Obra No. 617
Romance con el que canta la alegría del 50
aniversario de sus Bodas junto con los 75 de su edad

Bodas  de  Oro  y  de  Brillante


De conyugal unión hoy celebramos
cincuenta abriles, ideal Felita.
Bodas de Oro nuestras
y de Brillante mías con la vida.
En aquel 22 de Abril del treinta
veinticinco cumplía,
y quise el día aquel cambiar el rumbo
de mi pobre barquilla.
Y, ¡vaya cambio! Me embarqué en la tuya
no sólo por bonita
y graciosa y gentil la marinera,
sino porque no sé por qué sabía
que si contigo me embarcaba, Fela,
colmarías mi dicha
y, lo que más ansía el que se embarca:
¡que no naufragaría!

Bodas de Oro en que, si bien el oro
por su ausencia ha brillado en nuestras vidas,
la joya del amor, que, más que el oro
y el brillante se estima,
ésa, porque el amor a Jesucristo
le prestó su alegría,
a pesar de que innúmeras borrascas
de nuestro hogar batieron la barquilla,
fue el faro luminoso,
(y lo será mientras tengamos vida)
que la guió con sus fulgentes guiños
al santo puerto de la eterna dicha.

Bodas de Oro y de Brillante. ¡Vaya
combinación bonita!
Tal vez porque ni el oro ni el brillante
fueron nuestro ideal ni nuestra mira,
hoy ha querido el cielo regalarnos
esta joya magnífica
de unas Bodas de Oro en que refulgen
seis brillantes, Felita.
Seis brillantes que son nuestro tesoro:
tres hijos y tres hijas,
a los que exornan y les dan más brillo
de nuestros nietos las queridas chispas.

Hoy, mi Fela, que vemos, desbordantes
de gozo y de alegría,
cómo brilla esta joya que forjamos
de nuestro amor al fuego: esta joyita
hecha de corazones que nos aman
y que es nuestra familia,
levantemos a Dios las almas nuestras;
en plegaria tornemos estas rimas
y digámosle a Cristo: “Cristo bueno,
bendice esta alegría
con que hoy has regalado nuestras almas;
bendice esta familia
para que logre el ideal sublime
que en sus almas dejaste cual semilla,
y que lo logren todos; que ninguno
de aquellos que la integran no lo viva:
¡Celebrar en el Reino de tu Padre
unas Bodas eternas con Tu Vida!”

José Andrés del Valle
Miami, 22 de Abril de 1980